sábado, 21 de septiembre de 2013

Los Hueros – LOS GRANDES

Un día teñido.

Una sábana rasgada.

Un cielo perturbado.

Un rumor inesperado.

La soledad del que espera la llegada del grupo en la hora cierta.

Y es que … ¡me cago en todo!

La realidad vestida de versos.

Se acabó.

Y fumando espero… al hombre que más quiero.

Sólo y a lo loco subo Zulema, adelantando a montañeros como alma que lleva el diablo.

Camino de Loeches, aprieto zapatilla, encogido de hombros y con la mirada baja, tengo la esperanza de encontrar a lo lejos a esos que antes salieron.

Llegando a Arganda, un Chus con el grupo de Torrejón del Tandem me habla de cosas que ya había oído, que no creía y... ¡que no me gustan!

Hasta luego a todos,… volvemos a apretar con el mismo deseo de antes.

Girando a la izquierda y buscando el camino, se ve a lo lejos a un pelotón de color rojo,…

Por fin.

La subida les hace más lentos.

Aprovechando las fuerzas que quedan les doy caza.

Son Castaño, J.L. Causapié, Graciano, Romi, Carlos, Javi, Santiago y Peter, los que cansados de ver como cada salida es una batalla brutal contra la que no pueden competir deciden romper de forma continuada la hora fija de salida para hacerlo 15 minutos antes.

Aún así y a pesar de su avanzado estatus social no puedo decir más que ANDAN FENOMENAL.

Se van turnando.

Javi el Poli, que sufre de continuo en los días normales, aquí tiene su minuto de gloria subiendo desde Arganda y marcando un ritmo más que aceptable.

Peter, que deja de lado las batallas en los domingos, se mete en cabeza y en repechos de naturaleza corta aprovecha su potencia para tirar del pelotón.

Graciano, que nos muestra siempre su clase, ahora es un SUPER CLASE, todo un escalador que reluce en las subidas cuando estas se hacen largas.

El resto siempre a rueda y sin hacer ruido, Carlos, Santiago el Teniente, Romi.

Entre ellos también se dan sus palos pero arriba, siempre se espera.

Bajando Torres La Blanda, es precioso ver como estos señores lo hacen: A TODA OSTIA.

Lo que se respira es otra cosa.

Es el saber estar del silencio.

Porque yo sé lo que eres, lo que vales y lo que quiero para que sigamos adelante.

Los Hueros y el café nos hace a todos iguales.

La charla unifica, apacigua y hace equipo.

Cada maestrillo a su librillo.

Un abrazo a los campeones, a LOS GRANDES.

JC, V´13

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