Y levanta otro día.
La semana, dura como de
costumbre, deja un pequeño hueco para el relax.
Un sol pobre y con ojeras, nos
avisa que puede llover.
Es suficiente.
Allí, en esa plaza mítica entre
las míticas nos damos cita de nuevo.
Salida
Sábado.
Una multitudinaria salida, sin desbandada, sorprende a los presentes.
Pedaleando en calma salimos
dirección Camarma.
El peso de los primeros kilómetros
es responsabilidad de Embí y Alfredo.
El grupo permanece compacto en la
mayoría de los tramos salvo en los repechos, donde el Capitán Santiago y Javi
Civil se dejan descolgar un poco para tomar resuello.
Así, en suave sintonía, se
discurre sin percances hasta Meco.
A lo lejos, en lo alto, muy por
encima de nuestras cabezas se divisa la iglesia de San Pedro Apostol.
Primer Puerto
La cabeza de carrera sigue igual.
Embí y Alfredo establecen
cadencia suave y progresiva permitiendo mantener el mayor número de minutos al
pelotón unido.
Los primeros en caer por detrás:
Santiago, Javi, Romi.
El equipo aguanta bien.
Llegados a la penúltima de las
pronunciadas pendientes se produce el descalabro.
Uno a uno van dejando posiciones
de cabeza para que al final coronen en solitario Fran, Alfredo, Soriano, Villabilla y Raúl.
Fran, escapado en los últimos
metros, se lleva el premio de la montaña.
Buena subida de Bernardo y Rafita, pierden pocos segundos.
Arriba se espera al grupo.
Orientamos las miradas hacia
Anchuelo.
Javi el Guardia, comanda el
descenso.
Ahora son Pasamar y Soriano los que
nos llevan hasta el Gurugú.
Hasta Villabilla se pacta paz.
Segundo Puerto
Soriano rige esta orden de samaritanos que, a latigazos, perdonan sus pecados.
En plato grande se sube.
Jesús ataca con fuerza poniendo
unas cuantas curvas de por medio.
Atrás se mantiene la calma.
Se van dejando pasar los metros
sin acelerones.
Conforme se llega a la cima Jesús
se pone a tiro.
Soriano, sin levantarse del
sillín, mete dos piñones menos, acelera y sobrepasa a Jesús en El Robledal.
Meta Volante
Las cosas se calientan.
Soriano lidera el grupo hacia
Corpa.
Por detrás, Jesús, con ánimo de
revancha, intenta atacar antes del descenso.
Se escapa unos metros Villabilla, aprovechando lo cerrado de las curvas de esta zona.
Jesús, en el repecho y desde
atrás, lanza un golpe mortal que no es suficiente para llegar a la cima en
solitario.
Parada en el bar de Corpa. Unos
fuera y otros dentro.
A la vuelta hacia Alcalá nos
juntamos con Graciano.
Romi lidera el grupo.
Y así, se llega hasta Torres
donde oscurece el cielo apresurando la marcha hasta casa.
Fin de etapa
Hasta mañana.
JC, V´12
PD:
Llegando a Torres faltaba David y creo que otro, ¿¿??
Nos tenemos que contar.
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