Sorpresa en la plaza.
Sábado.
La élite ha venido.
El super campeón de montaña
master 30 de BTT de Pastrana, Oki, hace acto de aparición.
¡Nivelazo!
Fran, destroza el eje de pedalier
y se va a casa de Raúl para apretarlo un poco, mientras el resto del grupo
espera dando vueltas por las glorietas de la Fiat.
Mucha charla mientras los músculos
calientan.
Una, dos y hasta tres vueltas en
territorio hostil, lleno de vehículos, son necesarias para que lleguen los dos
que faltan.
Por fin, empezamos.
Subiendo el Gurugú, Oki y Edmun,
marcan velocidad en toda la ascensión. La combinación, de pie sobre los pedales
y el culo pegado al asiento, son la
tónica de toda la subida.
Se queda Jesús y algún otro.
Arriba, embalados, se sigue.
Tras un par de glorietas toca
esperar.
Agrupados de nuevo Oki y Edmun
ponen la máquina a funcionar llevando al grupo hasta Anchuelo a más de 40 km/h.
Silencio absoluto antes del
cambio de cabeza.
Ahora son Fran y Villabilla los
que tiran del pelotón subiendo hasta Pozuelo del Rey y desde ahí hasta Nuevo
Baztán.
La carretera que nos lleva desde
Villar del Olmo hasta Anchuelo parece un mar lleno de olas.
Llegando al desvío de la Olmeda
la cosa se calienta.
Jesús, a sabiendas del trabajo
que le toca, tira del grupo.
Según se le van acabando las
fuerzas, nos preparamos para la ascensión.
Colocados en primera línea: Oki,
Edmún, Cunego, Raúl,…. Detrás, los demás a la espera de qué es lo que pasará.
Cuando se retira Jesús, Oki entra
poco a poco, sin mucha fuerza, comienza a apretar de pie sobre la cabra.
Sobrepasamos el pueblo que
dejamos por debajo de nuestras cabezas y nadie da su brazo a torcer.
Más ritmo en las rampas duras,
pasan factura, primero a Edmún e inmediatamente después a Cunego.
Oki se marcha en solitario a la
cima: Premio de Olmeda.
Desde ahí hasta Pezuela,
espectáculo de potencia. Mínimo de 45 km/h te hacen esconder la cabeza tras el
cuerpo del que lidera los toboganes.
Llegados al pueblo en grupo,
volvemos atrás a esperar a los que faltan. Jesús ha pinchado.
El café, en el bar de Pezuela.
Y así, salimos de nuevo cambiando
la ruta prevista para dirigir el rumbo a Pozo.
Es ahora el turno de Jesús y Edi,
que tiran del grupo buena parte del tramo hasta Anchuelo.
Ahora, sufre Jesús al ritmo
marcado por Villabilla hasta el reventón.
Allí, un valiente Raul, intenta
hacerse con la cima.
Acercándonos agazapados y metidos
a rueda esperamos a que sucumba para pasarle con fuerza.
El grupo se parte en tres.
Oki, Edi y Cunego se van en
solitario para disputar la victoria de etapa mientras los demás, a ritmo,
seguimos camino al mismo lugar.
Preciosa etapa la de hoy.
Si bien, no han sido muchos Km,
la intensidad de los mismos nos ha hecho disfrutar.
Mañana: ¡La Reina!
JC, V´12
PD: Pablo Pasamar está hoy en el Triatlhón 'Infierno de Balaguer', ¡mucho ánimo campeón!
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