Son
días buenos.
Tras
la última reunión de socios, por fin, salimos todos juntos desde la Plaza: 10, 20,
30, 40,…socios.
Por
decenas vamos juntándonos y de todas las edades.
La
salida es como siempre, por pequeñas grupetas que dirección Meco se unifican y adoptan un ritmo rápido pero asequible para todos.
Llegados
al cruce de Azuqueca un malentendido rompe el grupo en dos, los que van a hacer
la ruta del libro y los que quieren ampliarla por la Ronda Norte.
Finalmente,
ocurre lo mejor, los de la Ronda Norte se repliegan y vuelven con los que van a
hacer la etapa 34 tradicional.
Como
no puede ser de otra manera, el repecho hacia Chilo es implacable y genera diferencias ya insalvables.
La
subida se hace a ritmo estable sin bajas.
Llegamos
a Pozo y se retrocede a recuperar a todos los socios antes de tomar café.
Por
el camino nos enteremos que Graciano ha roto el cambio y se vuelve a casa con
otros cuantos.
La
parada del café es una pasada, llenamos el bar, no cabe un alma más.
El
regreso es de menos a más.
Una
vez pisado Corpa el viento arrecia a muerte e ir en cabeza es un calvario.
Juankar
en los últimos 10 km mantiene un ritmo imposible de soportar y todo el mundo aguanta a
rueda con las orejas gachas.
Llegamos
a Alcalá a todo trapo y con las fuerzas muy mermadas.
Al
final casi 4 horas de bici en una grupeta de impresión.
Hasta
la semana que viene.
JC,
V´15
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